domingo, 12 de agosto de 2007

Meditación

Erasé una vez un mendigo en las calles de Londres....hacia frío y lloviznaba suavemente...se dirigía al malecón (para los de la LOGSE, muro que impide que las aguas del rio se desborden). Una vez allí se acomodó en un rincón y se dispuso a cenar un pequeño trozo de pan duro que le quedaba y acurrucarse en su viejo abrigo.

De pronto una gran limusina paró justo a su lado, y una bella joven bajó del coche, y dirigiendose a su lado le dijo :

- ¿No irá a dormir usted a aqui en un dia tan malo?? Venga usted a mi casa, que es grande, allí cenará y podrá dormir caliente.

Sin apenas pensarlo el vagabundo se levantó y se dirigió a la limusina. Dentro era todo un completo lujo, choffer, bebidas, tapiceria de cuero...y la guapisima muchacha a su lado charlando con él.

Llegaron a su casa, una enorme mansion con un jardín impresionante. Una vez dentro, la muchacha pidió a su mayordomo que le diesen de cenar opíparamente(para los de la LOGSE: "muy bien") y que preparasen el cuarto de invitados para el hombre.
Una vez cenado, el mendigo fue colocado en una habitación enorme con una cama calida y comoda.

La muchacha, estando en su cuarto, pensó...
- Mira que soy poco educada, voy a ver que tal está nuestro invitado, que no le he visto desde nuestra cena.

Se acercó a la habitación de su invitado y llamó suavemente a la puerta. Acto seguido esta se abrió y la muchacha pudo entrar a la habitación:

- ¿Está todo bien buen hombre?
- He comido como nunca lo habia hecho - respondió el mendigo - y la habitación es amplia y lujosa, y la cama está caliente... no puedo pedir mas...
- Pero veo que está usted solo - dijo la chica - Hágame un hueco en la cama y me meteré con usted, para hacerle compañia.

El mendigo se echó poco a poco a un lado de la cama, y murió ahogado en el rio Thamesis después de resbalar del malecón...


MORALEJA : Disfruta de tus sueños, pero no dejes que ellos sean tu vida, o la realidad puede matarte.

Postdata : como me como el tarro a veces, eh?

1 comentario:

valakirka dijo...

Un poco...triste historia.
No me gustan las historias con moraleja, normalmente tienen razón xD

No te comas el tarro, que eso es casi como soñar despierto.

Besos